En este capítulo examinamos el desarrollo de enfoques basados en la tecnología para extender la información y la atención de salud a las comunidades que luchan con la escasez de servicios de salud.
Principios: abordando una crisis global sistémica y compartida
La pandemia ha puesto de manifiesto la fragilidad e insuficiencia de los sistemas sanitarios en todo el mundo, pero sobre todo en las comunidades remotas, con recursos limitados y marginadas, donde faltan recursos e infraestructuras sanitarias. COVID-19 demostró que son los más vulnerables a las crisis sanitarias -los trabajadores de primera línea, las comunidades de color, los encarcelados y los ancianos- que son quienes suelen tener menos protección y apoyo.
La ausencia de una atención accesible, asequible y adecuada para todos es imposible de justificar en un mundo de riqueza excesiva. Esto es especialmente cierto ahora, cuando la tecnología ofrece formas de facilitar o superar muchos de los retos sanitarios habituales, como la prestación de servicios en zonas remotas o el seguimiento del de los pacientes fuera de los entornos sanitarios tradicionales.
Está más claro que nunca que hay una necesidad crítica de invertir y apoyar la asistencia sanitaria en las zonas de bajos recursos, y de ofrecer herramientas digitales que permitan subsanar las deficiencias de información e infraestructura a escala. Nosotros estamos construyendo en nuestras antiguas asociaciones con organizaciones y comunidades dedicadas a esta necesidad, ampliando su impacto con nuestras habilidades.
En la práctica
La tecnología tiene un gran potencial para promover la igualdad en la atención sanitaria, pero sólo si tiene en cuenta las necesidades de las comunidades desatendidas y las condiciones sobre el terreno. Nuestros proyectos sobre la cancha se definen por la estrecha colaboración con organizaciones locales que conocen a fondo el contexto regional y las necesidades sanitarias.
Bahmni: impulsando resultados sanitarios globales
A partir de una única conversación con un hospital sin ánimo de lucro de una zona rural de la India, Bahmni se ha convertido en un potente y versátil sistema de historia clínica electrónica (EMR) y de información hospitalaria, gratuito, de código abierto y creado específicamente para su uso en entornos con pocos recursos. Es altamente adaptable e intuitivo, requiriendo una formación mínima, pero es capaz de realizar e integrar funciones sofisticadas, como la generación de resúmenes de datos de pacientes, la captura de diagnósticos y la gestión de laboratorio y flujos de trabajo clínicos, en una variedad de dispositivos, e incluso sin una conexión fiable a Internet.
Tras haber guiado a Bahmni en sus primeras etapas de desarrollo, seguimos participando activamente en su evolución como miembro de la Coalición Bahmni, y seguimos contribuyendo a su estrategia, gobernanza y desarrollo. Thoughtworks estableció rápidamente un equipo global para reforzar las capacidades de Bahmni en respuesta a la crisis de COVID-19. Esto implicaba añadir funciones que permitieran a los proveedores de atención sanitaria hacer un seguimiento de las pruebas y el tratamiento, y eventualmente permitir a los médicos realizar consultas a distancia. En abril de 2021, Bahmni fue uno de los pocos proyectos reconocidos como Bien Público Digital por la Alianza de Bienes Públicos Digitales. Esta iniciativa, respaldada por UNICEF, pretende acelerar el progreso hacia los Objetivos Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, destacando las herramientas de código abierto que pueden ser adoptadas en países de ingresos bajos y medios.
Proporcionando una infraestructura crítica para los pagos y los diagnósticos
Alrededor de la mitad de la población mundial sigue sin tener acceso a los servicios sanitarios esenciales, y unos 100 millones de personas en todo el mundo corren el riesgo de caer en la pobreza debido a los gastos relacionados con la salud.10 Estos problemas son especialmente graves en el África subsahariana, donde los recursos son escasos y la cobertura sanitaria de la salud es esporádica.
La iniciativa mTOMADY, dirigida por la ONG Médicos por Madagascar, explora el potencial de la digitalización para superar las deficiencias de acceso y financiación. En colaboración con un equipo internacional de médicos, expertos y voluntarios, ayudamos a desarrollar la infraestructura básica de un nuevo sistema de pago relacionado con la asistencia sanitaria. mTOMADY proporciona a los pacientes un monedero móvil específico que, cuando se recarga, se reserva exclusivamente para gastos médicos, y que es accesible incluso en las comunidades más remotas. El sistema también facilita la remuneración del personal sanitario. Desde su puesta en marcha se ha ampliado a cientos de centros de salud y hospitales, y hay planes para llevarlo a más países que se enfrentan a desafíos similares, para llegar a un total de más de 15 millones de personas en 2025.
Sayu: conectando a los cuidadores de paliativos
La unidad de cuidados paliativos del Hospital Infantil Luis Calvo Mackenna de Chile se enfrenta a la difícil tarea de hacer que la etapa final de la vida de los niños con enfermedades terminales sea lo más confortable posible. La comunicación entre los cuidadores y los profesionales sanitarios es una parte esencial para mejorar la experiencia del paciente, y nuestro laboratorio de cambio social se unió a los profesionales médicos del hospital para crear una aplicación que hiciera que este diálogo fuera constante y fluido.
La aplicación Sayu permite a los cuidadores de los niños registrar el dolor y otros síntomas mientras están en casa, y conectarse rápida y fácilmente con el personal del hospital. Permite al personal acceder a los historiales médicos de los niños en tiempo real, para poder ajustar la medicación inmediatamente. Además de ayudar al hospital a mantener y mejorar la aplicación, estamos trabajando para poner el código a disposición de otras instituciones en las que pueda ser útil.
Más proyectos sanitarios
Los miembros de nuestro equipo también participan activamente en AIScope, un esfuerzo colectivo que incluye a miles de científicos y tecnólogos. AIScope es una herramienta de diagnóstico de código abierto y de conjunto de datos para ayudar al diagnóstico de enfermedades infecciosas como la malaria, que afectan de forma desproporcionada al Sur Global.
En China seguimos colaborando con REAP y en 2020 nos centramos en la nutrición infantil. Creamos una aplicación para tabletas con la que los trabajadores sanitarios de la comunidad pueden impartir cursos y un portal de administración para gestionarlos.
El camino a seguir
En todas las áreas de acción y mercados en los que estamos presentes, la salida de la pandemia creará nuevos retos y desequilibrios que sólo los esfuerzos colectivos pueden abordar. Seguiremos desempeñando un papel activo allí donde más se nos necesite y donde mejor podamos aplicar nuestra experiencia para crear resultados medibles, sin dejar de ser conscientes de que, a medida que la tecnología asume un mayor papel en la sociedad, conlleva amenazas junto con un potencial transformador. Nuestro trabajo seguirá basándose en el principio de la solidaridad por encima de la caridad, es decir, que los verdaderos avances se consiguen escuchando y forjando asociaciones estrechas con las comunidades y las personas afectadas por la injusticia y la desigualdad, y capacitándolas para liderar cualquier respuesta.