A medida que más empresas recurren a los eventos como medio para compartir datos entre microservicios, recopilar analíticas o alimentar lagos de datos, Apache Kafka se ha convertido en la plataforma favorita para sostener una arquitectura basada en eventos. Aunque Kafka fue un concepto revolucionario en mensajería persistente y escalable, se requieren muchas partes móviles para que funcione, como ZooKeeper, brokers, particiones y réplicas. Si bien estos pueden ser particularmente difíciles de implementar y operar, ofrecen una gran flexibilidad y potencia cuando es necesario, especialmente a escala empresarial industrial. Debido a la alta barrera de entrada que presenta el ecosistema completo de Kafka, nos complace la reciente explosión de plataformas que ofrecen el API de Kafka sin Kafka. Entradas recientes como Kafka en Pulsar y Redpanda ofrecen arquitecturas alternativas y Azure Event Hubs para Kafka proporciona cierta compatibilidad con las APIs de producción y consumo de Kafka. Algunas características de Kafka, como la biblioteca cliente de streams, no son compatibles con estos brokers alternativos, por lo que todavía hay razones para elegir Kafka en su lugar. Sin embargo, queda por ver si las desarrolladoras realmente adoptan esta estrategia o si es simplemente un intento de los competidores para alejar a los usuarios de Kafka. En última instancia, quizás el impacto más duradero de Kafka podría ser su conveniente protocolo y el API que se brinda a los clientes.